El primer paso para el control integrado del Comején es una inspección muy detallada de la infestación buscando señales como el sedimento que dejan las larvas y la orientación de los túneles que hacen en la madera.
En infestaciones que aparentemente son leves suele suceder que son graves porque el problema grave se encuentra en la parte oculta de la madera. En casos avanzados no se amerita un tratamiento porque la madera puede estar totalmente carcomida y sería mejor reemplazarla.
El segundo paso inevitablemente es el tratamiento químico en la mayoría de los casos ejecutado con una jeringa en cada orificio que se encuentre en la madera porque una simple aspersión sobre la misma es insuficiente para penetrar hasta donde se encuentra la plaga.
Un solo tratamiento es insuficiente. El tratamiento deberá tener tres controles, uno cada diez o quince días para romper adecuadamente el ciclo reproductivo de la plaga. Se deberán fumigar los muebles o piezas de madera donde no se encuentren orificios porque en caso de no hacerlo la plaga puede pasarse a ellos.
El éxito del programa depende de la realización del trabajo en todas las áreas afectadas y de la continuidad de los controles recomendados.